Antes de viajar a Pekín, tenía mis temores sobre lo que me podía encontrar. Era mi segunda incursión en un país asiático, y después del viaje a la India, en la que se había habido luces y sombras, cierta inquietud rondaba en mi cabeza los días previos al viaje.
Pero, todos los temores finalizaron pronto, una capital moderna, muy preparada para el turismo, con una red de metro que te lleva a los principales lugares turísticos, limpia y aún más después de haber albergado en el 2008 los Juegos Olímpicos que cambiaron la imagen del país. Por cierto, curioso país, con una férrea dictadura comunista combinada con una economía de mercado, al más puro estilo de los países occidentales...
En la puerta de Tiananmen, con Mao al fondo |
Conseguimos salir de Madrid, por los pelos, gracias a nuestros "amigos" los controladores -desde Pekin, nos enteraríamos después como la liaron parda -, con un retraso de más de dos horas, lo que provocó que al llegar a Francfort, tuvieramos que ir a la carrera para llegar a la puerta de embarque, recuerdo las palabras de la azafata de Lufthansa cuando le preguntábamos que nos informara sobre nuestra conexión a Pekin "critical situation, running, running..." Llegamos a Pekin y el trámite de la aduana fue rápido y sencillo, nos llamó la atención el control de temperatura corporal que hay que pasar. De ahí a recoger las maletas en las cintas, que tras tres cuartos de hora de espera, no aparecieron , así que a reclamarlas y con ello más tiempo perdido ! Luego, nos estaba esperando la línea de metro del aeropuerto que por el módico precio de 25 Y nos acercó al centro de la ciudad. En el mismo metro conocimos a un chico de Bilbao, que estaba trabajando en China, y que nos dió los primeros consejos sobre la ciudad.
El hotel que habíamos reservado era el Novotel Xinqiao, lo mejor sin duda fue que estaba muy bien situado, enfrente de la boca de metro de Chongwenmen y a sólo veinte minutos andando de la Plaza de Tiananmen.
Sólo teníamos cuatro días para visitar la ciudad. El primer día pudimos visitar la mítica Plaza de Tiananmen, que ostenta el título de la plaza más grande del mundo, el parque Beihai con su famosa Pagoda Blanca y el mercado nocturno de la concurrida calle de Wangfujing, la calle comercial por excelencia de Pekín.
Puerta de Zhengyanguen, dinastía Ming |
Parque Beihai, con la pagoda blanca al fondo |
Al rico pinchito !! en el mercado nocturno |
En el teleférico camino de la Gran Muralla |
Llegó la hora de la Gran Muralla China, y como no, hacerla por libre, había que ir al tramo de Mutianyu, , primero tomamos el bus 916 -15 Y- que nos dejó en Hairou , en el trayecto conocimos a Cristian, un chico italiano que llevaba un año viviendo en Pekin y que en Hairou nos ayudó a negociar un buen precio -25Y por persona- con uno de los locales que nos acercó en coche hasta Mutianyu. Una vez compradas las entradas, por cierto fue el único sitio donde coló "el carnet de estudiante", subimos en teleférico, en poco más de tres minutos nos llevó a la Gran Muralla.El tramo es duro, te hartas de subir y bajar escaleras, pero vale la pena !!
De noche, escapada al Mercado de la Seda, donde regatear se convierte en un arte...conviene ir a última hora de la tarde, aprovechando que las vendedoras están más cansadas y así conseguir un mejor precio.
Al inicio de la Gran Muralla ¡ Vaya vistas ! |
Y llegó nuestro penúltimo último día en Pekín, visitamos la espectacular Ciudad Prohibída, que fue sede del Palacio Imperial durante las dinastías Ming y Qing, las dependencias están muy cuidadas, pero por desgracia sólo puedes verlas por fuera. Después gracias a la excelente línea de metro -2Y por trayecto-, nos acercamos el Palacio de Verano, muy ligado a la emperatriz Cixi que en 1899 se encargó de restaurarlo. Por la noche, cenamos en el restaurante de un huton en el que sólo había locales, no sé ni como conseguimos que nos entendieran, la carta estaba en chino y allí no hablaban más que chino, pero bueno, bonito y barato, y además comimos con palillos !!
Y llegó el último día, despúes del chek out del hotel, tomamos el metro en dongzhimen y en poco más de veinte minutos nos plantamos en la terminal 3 del aeropuerto. Facturamos sin colas y después de casi once horas de vuelo, llegamos a Francfort con retraso, lo que motivó que perdiéramos la conexión a Madrid y ahí empezó la odisea para salir de un aeropuerto que se convirtió en una ratonera. Después de estar metidos cinco horas en un avión de Spanair, que nunca despegó, cerraron el aeropuerto por la nieve y ahí nos vimos tirados toda la noche, sin ninguna información, gracias Lufthansa !! haciendo colas, sálvese quién pueda !! Durante la larga espera conocimos a Dani y a Elena, una pareja de Málaga con la que hicimos buenas migas, hasta que por fin pudimos tomar un avión el día siguiente, rumbo a Madrid.
De acampada en el aeropuerto de Francfort Y Francfort nos despide nevando |
Hola Víctor,
ResponderEliminarEstá genial lo de ver tu propio viaje plasmado en imágenes y texto, casi que me apetece volver a Pekín. Ha sido un viaje muy intenso,lleno de vivencias y que nos ha dejado muy buen sabor de boca.
Besos
Pero que guapos que estáis!!! que bueno veros por la red. Desde luego bien aprovechados los días. Yo me quedé con muchas ganas de visitar el templo de los Lamas... pero como se puso malo Alex, perdimos casi un día entre pitos y flautas, pero sin problema porque quiero volver a Pekin.
ResponderEliminarAhora mismo te enlazo en mi blog!
Un abrazo a los dos!
Mira que entré a ser el primero en dejar un comentario y no me ha dado tiempo... Se me han adelantado Ali y Víctor.
ResponderEliminarMe alegro muchísimo que te hayas animado a escribir y seguiré tus andanzas. Para enlazarte te lo pondré más difícil que Maka, quiero ver unos cuantos posts más. Para que esto no sea flor de un día.
Un abrazo a Ali y a tí y FELIZ NAVIDAD!!!
Sele
www.elrincondesele.com
Cuanto me alegro de ver vuestro blog, estaìs muy guapos, así puedo hacer comentarios, yo se muy bién lo que os gusta viajar.
ResponderEliminarTeneis que publicar todos los demás viajes, que son muchos.
Un abrazo a los dos.
Feliz Año Nuevo. Adela
Hola,
ResponderEliminarMuchas gracias a todos por la acogida del blog. A Alicia, compañera inseparable de viajes, a mi tocayo Victor, gran viajero y con un corazón enorme, a Sele, la persona que me ha dado el impulso necesario para viajar y a Adela, que siempre está ahí para apoyarnos.
Un abrazo.
Hola Victor:
ResponderEliminarEres un fenómeno. Es un gran blog. Mi más sincera enhorabuena. Está muy, muy, muy bien. Un abrazo.
Juanito Baró
Hola Juan,
ResponderEliminarSe me va a subir los colores...oye que me alegro que te haya gustado el blog. Esta semana toca el II capítulo de Bongiorno Italia y la siguiente Atenas,...
Un abrazo.
Bueno Victor, después de haber empezado tu blog por lo más actual ahora toca empezar por el principio.
ResponderEliminarFelicitarte una vez más por este blog, me gusta mucho tu redacción así como las fotos. Gracias por hacernos partícipes.
Una gaita lo del aeropuerto de Frankfurt, suele pasar...la verdad que es alucinante lo que se puede hacer en 4 días, un abrazo pareja
Hola Tino,
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario !!
Lo de Francfort fue una faena y de las gordas, sobre todo sentimos mucha impotencia por lo mal que nos trataron. Ahora estamos en la fase de reclamaciones a la compañía, a ver en que queda la cosa...
En Pekín nos metimos unos pateos de miedo para ver lo máximo posible de la ciudad, que está chulísima !!
Un abrazo.