Chicago, la ciudad del viento II

30 mayo 2012

VISITA AL DOWNTOWN DE CHICAGO


    La Escuela de Chicago es una corriente arquitectónica, que surgió a finales del siglo XIX y principios del XX en Chicago, a raiz del Gran Incendio de 1871, que asoló gran parte de la ciudad. Las autoridades se vieron obligados a levantar de nuevo casi la totalidad de la ciudad, dando lugar a una gran especulación sobre los terrenos y una gran demanda de construcción, la solución fue levantar muchos pisos en poco terreno, construyendo en vertical, así nacieron los primeros rascacielos. Los arquitectos de la  Escuela de Chicago desarrollaron nuevas técnicas de construcción e innovación para levantar los rascacielos. El uso de materiales resistentes al fuego, el acero, el hierro fundido y la terracota. Los primeros ascensores eléctricos, el uso generalizado de ventanas, la eliminación de los muros de carga, el uso de pilares de hormigón como cimientos de los edificios y la supresión de elementos decorativos en la fachada.






   En nuestro segundo día en la ciudad, íbamos a disfrutar y a empaparnos de la arquitectura antigua y moderna de la ciudad, visitando el downtown. Para ello, cogimos el bus nº 147, con parada delante del hotel , que nos acercó a la Avenida Michigan, también conocida como la "Milla Magnífica" y ahí teníamos, delante de nosotros, uno de los principales iconos de la ciudad, el John Hancock Center, impresionante rascacielos de 100 pisos, o lo que es lo mismo 344 metros de altura. Fue diseñado en 1969 por Bruce Graham y Fazlur Khany. Hoy en día es el cuarto rasacacielos más alto del mundo. Su característica forma trapezoidal de color negro, que recuerda un obelisco, y presidido en lo más alto por dos antenas, domina el horizonte de la ciudad. El edificio alberga oficinas, un restaurante, un bar y un observatorio de pago, 15 dólares en su planta 95.





   
    Accedimos al hall y subimos en el ascensor del John Hancock Center, hasta la planta 95 donde está el restaurante con amplios miradores, pero rápidamente nos preguntaron si queríamos una mesa, así que subimos una planta más hasta la 96, donde se encuentra el bar. Aquí, tuvimos más suerte, entramos sin que nadie nos dijera nada y disfrutamos desde los amplios miradores de unas vistas impresionantes del skyline de Chicago y del lago Michigan. Al bajar en el ascensor, cómo notamos la presión en los oídos.



   

   Enfrente del John Hancock Center, se encuentra una de las iglesias más bellas y antiguas de la ciudad, Fourth Presbyterian Church, diseñada por el arquitecto Ralph Adams Cram. Visitamos primero el claustro, remanso de paz en medio de la siempre bulliciosa Avenida Michigan, en medio del claustro se halla la "fuente de los niños"  regalo del arquitecto Howard Van Doren Shaw a la congregación. Después, accedimos a su interior, donde destaca el techo ornamentado de madera y las bellas vidrieras y donde se conserva un bonito  órgano, protagonista de los conciertos que se ofrecen en la iglesia y al que no pudimos asistir por falta de tiempo.




   A pocos metros en la Avenida Michigan, nos encontramos con dos de los pocos edificios que sobrevivieron al Gran Incendio de 1871 que destruyó casi la totalidad de la ciudad, Water Tower y Pumping Station, ambos diseñados por Williams W. Boyington. La Torre del Agua fue construída en 1869, dos años antes de la fecha que cambió para siempre la ciudad. Tiene una curiosa forma de castillo gótico, hoy es como un islote rodeado de los rascacielos que se elevan en el horizonte de la Avenida Michigan. A pocos metros, el otro edificio que sobrevivió al Gran Incendio,  la Estación de Bombeo de Agua, edificado en 1866,  hoy es un centro de información turística de la ciudad.



    
  
    Seguimos caminando por la Avenida Michigan, admirando su arquitectura y con los ojos siempre atentos, para que no se nos escapara ningún detalle , hasta que llegamos a uno de los edificios más emblemáticos de Chicago, la Tribuna Tower. El origen del edificio es curioso, para celebrar el 75 aniversario del periódico Chicago Tribune, se organizó en 1922 un concurso para crear el edificio más bello del mundo, el proyecto ganador fue el de la firma Howells and Hood y el resultado fue un edificio de estilo neogótico, donde  los arbotantes de la torre superior imitan a los de la Catedral francesa de Ruan. Lo que supone una nueva mirada hacia las alturas para poder contemplar la belleza y originalidad de la torre superior.
A pocos metros del Tribuna Tower saludamos a la estatua de la legenderia actriz americana, Marilyn Monroe y que no pasa desapercibida por su gran tamaño.




    


    
    En el sur de la Milla Magnífica, encontramos uno de los edificios más singulares de Chicago, el edificio Wrigley, formado por dos torres unidas por una pasarela. Su carácter particular viene dado por la estructura superior, que imita la Giralda de Sevilla y su gran reloj de cuatro esferas. En su construcción se emplearon 250.000 azulejos de terracota blanca.





     Y llegamos a la zona que más nos gustó de la ciudad, la confluencia de la avenida con el Río Chicago, junto al puente de la Avenida Michigan, que fue el primer puente basculante de dos alturas del mundo, finalizado en 1920, se alzan a pocos metros de los márgenes del río, edificios tan impresionantes y vanguardistas como la Torre Trump, con su característico color plateado azulado, de 98 plantas, que sobresale en el cielo de la ciudad. Fue diseñado en el 2009 por Adrian Smith. A lo largo del río Michigan, se pueden contar hasta cincuenta y dos puentes, treinta y ocho de ellos levadizos,  que recorren el cauce del río junto a la impresionante arquitectura de la ciudad. La imagen del río deslizándose entre los rascacielos que se asoman a él, es de postal y no te cansas admirarla y fotografiarla. A los lados del puente hay unas escaleras por las que puedes bajar hasta la orilla del río, y que cuando hace buen tiempo se convierte en una zona de paseo y terrazas.





    

     Continuamos el agradable paseo por Chicago, siempre sin dejar de mirar a las alturas, hasta uno de los edificios más importantes de la ciudad, el 35 East Wacker Drive, el edificio tiene una historia muy curiosa detrás, los joyeros que ocupaban los primeros veintidós pisos del edificio, preocupados por la seguridad, disponían de ascensor para subir directamente en sus vehículos a la planta. También fue famoso porque Alcapone durante la Ley Seca frecuentaba el Stratosphere club situado en la cúpula. Fue diseñado por Thielbar y Fugard en 1926, con una caracterítica cúpula con forma de tarta de cumpleaños.



    



    Nuestra siguiente parada, fue  el mítico Teatro Chicago. Inaugurado el 26 de octubre de 1921, en estilo barroco francés, con una fachada que imita en miniatura el Arco de Trinfo de París en terracota blanca. Con una capacidad para 3.600 espectadores, estuvo a punto de ser demolido, tras ser cerrado el 19 de septiembre de 1985, pero tras un cambio de propiedad y una reforma que duró nueve meses abrió de nuevo sus puertas el 10 de septiembre de 1986. El gran cartel que preside la fachada se ha convertio en un icono de la ciudad. A esas horas de la mañana sólo pudimos acceder al hall y ver hasta donde nuestro ojos nos permitieron, que fue más bien poco.



    

    Continuamos nuestro recorrido hasta la Daley Civic Center Plaza, donde se encuentra la escultura conocida como El Picasso, obra del malagueño Pablo Ruiz Picasso en 1967. Curiosamente, Picasso no le dió ningún título a la obra, fue el pueblo de Chicago quien la denominó posteriormente con ese nombre. Realizada en acero, mide quince metros de altura. Por su diseño abstracto y el uso de materiales poco convencionales, fue en sus inicios objeto de controversia, pero con el tiempo se ha convertido en una las obras más valoradas y queridas de la ciudad. En la misma plaza se encuentra el Ayuntamiento de la ciudad, pero carece de interés.






     
     Y seguimos callejeando por Chicago hasta el Chicago Cultural Center, construído en 1897 como sede de la bibioteca de la ciudad. Desde 1991 es el centro de artes dramáticas, visuales y literarias y cuenta también con un centro de información al visitante. El complejo fue diseñado por el estudio de Boston  Shepley, Rutan y Coolidge. El edificio tiene dos entradas,  en la de Washington Street, en su interior destaca una majestuosa escalinata de marmol de Carrara, con medallones de marmol color esmeralda procedentes de Irlanda. Si subes por ella puedes admirar en el bajo de la escalera que lleva al piso superior, bellos mosaicos. Siguiendo por la misma escalinata se llega a una de las salas más interesantes,  Preston Bradley Hall, donde se encuentra una auténtica joya, la cúpula de tiffany, obstenta el título de ser la más grande del mundo realizada en ese material. Fue diseñada por J.A. Holtzer. 
En la otra entrada al Chicago Cultural Center, nos encontramos con otra interesante sala la G.A. Rotunda, con una bella cúpula de vidrieras con elementos decorativos renancentistas, creada por Healy y Millet.






    

     Reanudamos el paseo por Chicago, camino del que es sin duda el parque más bello de la ciudad, el Millennium Park. Pulmón verde de Chicago,  rodeado de espectaculares rascacielos y con varias obras de arte vanguardistas que se exponen en sus jardines. El parque se planificó en 1998, pero no fue hasta 2005 cuando se dió por finalizada la obra. Iniciamos la visita en una de las principales atracciones, Cloud Gate, es un enorme espejo de placas de acero inoxidable, conocido popularmente como la "bean" la alubia, alrededor de ella se concentraban un montón de personas entretenidas en buscar su imagen y jugar con ella, nosotros nos quedamos un buen rato admirando como se reflejaba en él, el skyline y el cielo azul de la ciudad.





    
    Otro de los puntos fuerte del parque, es la Crown Fountain, con un diseño vanguardista y muy atrevido, obra de Jaume Plensa, consiste en dos estructuras de 15 metros recubiertas de ladrillos de vidrio, que proyectan imagenes de la población local, en su gran mayoría sonriendo, hasta que de una manera sorprendente por los labios de una de las imágenes, empieza a fluir una corriente de agua. Nos detuvimos ante la fuente un buen rato para poder contemplar el momento en que caía agua.





    Completa el Millenium Park, el Jay Pritzker Pavilion, pabellón de música al aire libre, obra del conocido arquitecto Frank Gehry. El escenario está realizado en acero pulido y conectado con los espectadores con un enrejado de acero entrecruzado.







     Después de la visita al Millenium Park, el tiempo empezó a empeorar, el cielo se cubrió de gris y la temperarura bajó en un instante, en esos momentos íbamos camino de State Street, donde se hallan varios edificios de finales del siglo XIX y precursores de los rascacielos modernos. El primero que visitamos fue el edificio Reliance, construído en 1895, en su época fue toda una innovación por los materiales utilizados en su construcción, acero y pilares de tamaño doble que permitían dotar al edificio de grandes ventanales. Fue obra de John Root.
Continuamos la ruta por State Street hasta el edificio Carson Pirie Scott, obra de Louis Sullivan en 1899, la ornamentación metálica de los dos primeros pisos dieron un carácter singular al edificio a finales del siglo XIX. Su interior se estaba rehabilitando,  por lo que no pudimos admirarlo en su total esplendor.



    


     Camino de la Torre Sears, nos detuvimos en el edificio Rookery, cuando se inauguró en 1888 era el edificio más alto del mundo, con doce plantas. Con fachada de ladrillo rojo oscuro con decoración en terracota y grandes ventanales, que para su época, finales del siglo XIX eran una gran innovación. Pero lo más llamativo no es su fachada, sino un patio que alberga en su interior. Por ello entramos en el edificio, para poder disfrutar del bello patio interior de dos alturas, restaurado en 1907 por Frank Lloyd Wright, con dos escalinatas, la central que da acceso a la entreplanta y una de hierro que sube a la segunda planta. En el hall de entrada,  conserva los ascensores de época y que recuerdan los que hemos visto multitud de veces en películas americanas antiguas.





    
      A pocos metros del Rookery, se halla el Chicago Board of Trade Building, proyectado en 1930 para albergar la Bolsa de Valores de Chicago. Es un ejemplo de art decó, sobre su planta 42, se levanta un tejado con forma piramidal y sobre lo más alto se erige una estatua de Ceres, diosa romana de la agricultura, de las cosechas y de la fertilidad.



   
     La Torre Sears, la imagen del Chicago moderno y vanguardista, es el edificio más alto de la ciudad, 110 plantas o lo que es lo mismo 443 metros de altura, 527 si se incluyen las antenas. El edificio fue diseñado en 1974 por Bruce Graham, se emplearon en su construcción 76.000 toneladas de acero revestidas de aluminio negro. Cuenta con 16.000 ventanas de color bronce. Se le conoce también como Willis Tower. En su planta 103, está el skydeck,  es un mirador con balcones de vidrio, no apto para personas con vértigo, 17,50 dólares la entrada. Cuando subimos a la planta donde se encuentra el skydeck, había que esperar 1 hora para poder acceder, así que decidimos dejarlo para mejor ocasión.



    Camino de Grant Park, pasamos junto a la Harold Washington Library, es considerada la biblioteca más grande del mundo. Diseñada por Thomas Beeby en 1991, en su interior hay más de siete millones de libros. Nos llamó la atención, las lechuzas que se alzan sobre lo alto de su fachada, símbolo de la sabiduría. Por la hora que era ya, la biblioteca estaba cerrada y no pudimos acceder a su interior.



    

     Y llegamos a Grant Park, una inmensa zona verde en la ciudad, formada por terrenos ganados al mar y a los escombros de los edificios destruídos tras el Gran Incendio de 1871. En un principio, se le denominó Lake Park, pero en 1901, se le cambió el nombre a Gran Park en honor al Presidente de Estados Unidos Ulysses Grant. Presiden la entrada al parque, dos estatuas ecuestres de dos guerreros indios, realizadas en bronce, son obra de Ivan Mestrovic en 1928.




   
    Dimos un pequeño paseo por el parque, el frío era intenso e iba en aumento según te acercabas al Lago Michigan, por lo que nos asomamos a él y permanecimos por poco tiempo. A pocos metros, destaca por su belleza, la fuente de Buckingham Fountain,  Kate Sturges Buckingham fue el mecenas de la obra, como homenaje a su hermano Clarence y el diseño corrió a cargo de Marcel Francois Loyau, tomando como modelo la fuente de Latona en los jardines franceses de Versalles. La fuente realizada en marmol rosa, simboliza el lago Michigan y los caballitos de mar que la rodean representan los estados que bordean el lago, Illinois, Michigan, Indiana y Wisconsin. Mientras estábamos visitando la fuente, fueron llegando grupos de jóvenes estudiantes recién graduados, vestidos de gala, a pesar del frío extremo.  La anécdota surgió, cuando al verme con la cámara de fotos, no dudaron un instante en colocarse delante de la fuente,  posando como elegantes modelos para el improvisado reportero en el que me había convertido, después de unos segundos de duda, esperando a ver si me daban una cámara de fotos, qué hago...pues nada les saco una foto con mi cámara. Con una sonrisa en los labios finalizamos un intenso día, visitando el dowtown de Chicago.





#POSTAMIGO relato muy recomendable :  Mi Baúl de blogs La Avenida Michigan, the Magnificent Mile

31 comentarios:

  1. Hola Victor.
    Cuentas cosas muy interesantes,me ha gustado mucho.
    Y muy buenas fotos!
    Un besin ,pa los dos.
    Ana.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola yomisma_any, Ana,

      Gracias por tu comentario.
      Ana, me alegra que te haya gustado el relato y también las fotos.

      Un besín.

      Eliminar
  2. No imaginaba que Chicago tuviera tantos edificios tan chulos! Me ha llamado la atención en especial la Water Tower! Quien se iba a imaginar encontrar un edificio así que parece gótico en medio de una moderna ciudad como Chicago!
    Y qué cambiazo pegó el tiempo, no? por la mañana tan soleado y luego tanto frío por la tarde!
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Carmen,

      Gracias por tu comentario.
      Water Tower y Pumping Station son dos de los pocos edificios que se salvaron del Gran Incendio de 1871."Gracias" a este triste acontecimiento, se empezaron a construir en la ciudad los primeros rascacielos.

      Un abrazo.

      Eliminar
  3. Un día lleno de contrastes arquitectónicos y temporales porque menudo tiempo que os hizo. De todas las visitas me quedo con el Millenium Park, debe ser una maravilla pasear entre la naturaleza rodeado por obras de arte y rascacielos, nunca me había llamado la atención Chicago pero veo que es bastante interesante.

    Un abrazo !!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Carfot,

      Gracias por tu comentario.

      El Millenium Park, fue una de las zonas de Chicago que más me gustó. Carfot, como bien dices pasear entre la naturaleza, admirando las obras de arte y rodeado de rascacielos.

      Un abrazo.

      Eliminar
  4. Me encanta la arquitectura contemporánea, así que Chicago está entre mis destinos más deseados. Preciosos edificios, me encanta esta entrada, estoy deseando estar en el Millennium Park y de poder ver en directo todo esto que nos estás contando. Gracias y un saludito!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Caliope,

      Gracias por tu comentario y tus palabras.

      Arquitectónicamente, Chicago es una referencia a nivel mundial. El Millenium Park y la zona del río fueron mis lugares favoritos en la ciudad.

      Saludos.

      Eliminar
  5. Preciosas fotos de la famosa arquitectura de Chicago. Felicidades y seguiremos atentos ;-)
    Vaya con el tiempo, estaba viendo las fotos de por la mañana y pensando en lo bonitas que estaban saliendo con el cielo tan azul... y de pronto todo se ha vuelto gris!!!
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Cool,

      Gracias por tu comentario.

      Pudimos hacer fotos muy chulas hasta media tarde. Pero, después de visitar el Milenium Park, el tiempo empezó a empeorar, se puso más frío y el cielo se cubrió de nubes. Una pena !!

      Un abrazo.

      Eliminar
  6. No cogisteis dolor de cuello de tanto mirar para arriba? a mi me paso cuando estuve en Nueva York.. me ha recordado mucho tu post a mi viaje de fin de carrera.

    Un post super interesante!

    Un saludo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Raquel,

      Gracias por tu comentario.

      Me alegra que el post te traiga buenos recuerdos del viaje de fin de carrera a Nueva York, escogísteis buen destino !! Chicago está muy chulo, pero Nueva York siempre será Nueva York...

      Saludos.

      Eliminar
  7. Interesante ciudad Chicago! Desde luego es un "must" si algún día viajo a EEUU... que buena la foto de los estudiantes!! XD

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola purkinje,

      Gracias por tu comentario.

      La foto de los estudiantes fue un poco "corte", estaba esperando a ver si me daban una cámara de fotos...

      Saludos.

      Eliminar
  8. Qué curiosa la Crown Fountain, me ha gustado mucho!!! Tuvisteis mala suerte con el tiempo pero veo que le plantasteis cara y hasta hicistes de fotografo profesional, jejejeje. Lo mismo le coges el gustillo!!! Un abrazo. ;-)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Babyboom,

      Gracias por tu comentario.

      En el Millenium Park, la Crown Fountain y la Cloud Gate, la "alubia", con un diseño vanguardista e innovador y con el entorno de naturaleza y rascacielos, nos gustaron mucho. Ya te digo con la foto...jeje

      Un abrazo.

      Eliminar
  9. Impresionantes edificios!! Yo también noto mucho la presión el los oídos. Sin ir más lejos, la semana pasada en París, en la Torre Montaparnasse y eso que es bastante más baja que en donde estuvisteis vosotros :-)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Artabria,

      Gracias por tu comentario.

      Sí que notamos mucho la presión en los oídos, eran 97 pisos...algo parecido nos pasó en Hong Kong, al bajar en los ascensores de los rascacielos de la zona financiera.

      Saludos.

      Eliminar
  10. Un gran reportaje de esta ciudad tan impresionante y unas magníficas fotos. El Millennium Park muy interesante, lleno de inmensas obras de arte.

    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Cincuentones,

      Gracias por vuestro comentario.

      Me alegra que os hayan gustado el relato y las fotos.

      Saludos.

      Eliminar
  11. Por lo que veo, Chicago es el paraíso para todo aquél que le guste la arquitectura. Me ha parecido muy bonito el Chicago Cultural Center.
    Muy divertida la foto de los adolescentes "disfrazados", les encanta vestirse de esa forma. Hace dos años tuvimos una chica en casa de Indiana en un intercambio y se ha graduado hace pocas semanas y llevaban todos las mismas pintas que los de tu foto ;-)

    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola María Teresa,

      Gracias por tu comentario.

      María Teresa, el interior del Chicago Cultural Center es impresionante, con dos salas muy bellas, la Preston Bradley Hall con la cúpula de tiffany y la G.A. Rotunda.
      Sí que me llamó la atención la vestimenta de los adolescentes y más con el frío que hacía...

      Un abrazo.

      Eliminar
  12. Ainsss, nada que no te hubiese dicho en el post anterior ... más que nostalgia de cuando estudié allí en la NIU :( ...

    I LOVE CHICAGO :)

    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Alfonso,

      Gracias por tu comentario.

      Alfonso, me alegra que los relatos te sigan trayendo buenos recuerdos de tu estancia en Chicago.

      Saludos.

      Eliminar
  13. Jajaja! Qué gracia que se pusieran todos los estudiantes a posar para vosotros.
    Muy chula la ciudad. Una ciudad de altos vuelos... Yo creo que no saldría al balcón ese acristalado. Cada día me dan más miedo las alturas.

    Un saludo ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Helena,

      Gracias por tu comentario.

      Sí que daba un poco de vértigo las vista desde los rascacielos. Y mucho más desde los balcones de vidrio, "el skydeck" de la Torre Sears.

      Saludos.

      Eliminar
  14. Bueno, me va a ir muy bien, que sólo me quedan 2 semanas para ir.
    Me ha gustado mucho el relato porque tu visita la has enfocado a como yo la tengo planificada, pues yo tb voy a darle un toque arquitectónico al recorrido. Tengo muchos edificios señalados en el mapa, rascacielos históricos, edificios de Mies van der Rohe, etc. Mira que tenía guardados y algunos se me habían pasado por alto al ver tu relato, enseguida lo corrijo. Otros te faltan, aunque espero las siguientes partes. Pero en definitiva, lo que veo, es que Chicago es difícil de acabarla y descubrirla... uff, qué ganas de ir!!
    Muchas gracias por esta segunda parte

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Hector,

      Gracias por tu comentario.

      Me alegra que el post te sea útil para tu próxima visita a Chicago. A ver si me pongo las pilas y antes de que te vayas, publico un par de post más, lo voy a intentar.

      Saludos

      Eliminar
  15. Tengo 74 años y soy una incansable viajera….M e ha encantado tu reportaje …, ERES UN GRAN GUIA y vaya si tienes cualidades de Anfitrión Turístico…., mira…, he visitado dos veces Chicago, en una de ellas, hice el paseo Arquitectural por el Canal. Se que chico ante tu relato, con pena veo que me falto mucho por conocer, gracias al Tour que he visitado en tu blog.…. Mi hijo me a pedido, tome nota de lo que me falto conocer y me llevara… TE FELIITO y GRACIAS, GRACIAS , GRACIAS... KITTY CABRERA una viejita aventurera...

    ResponderEliminar
  16. Lindo victor…
    Se te agradece gentilmente tu pronta atención,..
    .Un fuerte abrazo kitty

    ResponderEliminar
  17. hola muy buen blog yo acabo de ir y si tuve la oportunidad de visitar la mayoria de estos lugares y veo que me han faltado por q no sabia de ellos pero ahora se y en mi proximo viaje son los primeros q visitare,, uno tambien muy bello y divertido que te falto fue el famoso NAVY PIER. asi como el ACUARIO y el MUSEO..

    ResponderEliminar