Un bosque sagrado, macacos de cola larga que campan a sus anchas , el equilibirio entre el bien y el mal tan presente en la religión hinduísta, templos semiocultos entre la vegetación, sorprendentes esculturas que te encuentras a cada paso, fuentes en las que juegan los monos, árboles gigantescos de los que cuelgan lianas y con raíces enormes que trepan por sus troncos, puentes que atraviesan riachuelos y todo ello en un entorno natural, rodeado de un paisaje verde y frondoso, que por momentos parece transportarte a la selva, mientras esperas la llamada de Tarzán...
Una de las visitas imprecindibles en Ubud es el Sacred Monkey Forest Sanctuary, la Reserva Sagrada del Bosque de los Monos situado en el extremo sur de jalan Monkey Forest en la villa de Padangtegal. Hacia allí nos fuimos caminando, después de dejar en el hotel cualquier tipo de objetos que pudieran llamar la atención a los monos como bolsos, mochilas, gafas...la experiencia la teníamos de nuestro viaje a la India cuando en Jaipur fuimos a visitar el Templo de los Monos y todavía recordamos el susto que nos llevamos cuando un mono se abalanzó por detrás nuestro sobre un botellero de agua a la vez que emitía un fuerte chillido.
El Monkey Forest está considerado un lugar sagrado para el hinduísmo balinés, diferentes ceremonias religiosas se celebran a lo largo del año en los tres templos que coexisten en la reserva natural, así la Tumpek Kandang donde los fieles hacen ofrendas al bosque y a los animales o la Tumpek Nguduh con ofrendas a las plantas.
Los monos que son los auténticos protagonistas, campan a sus anchas y habitan en el bosque en un número aproximado de 605, son macacos balineses, también conocidos como macacos de cola larga, pues es ésta una de las características físicas más llamativas, junto con anchos hombros, pelo facial que asemeja a un bigote y largos dientes caninos...
En la religión hinduísta que busca el equilibrio en la dualidad del bien y el mal, se refleja también en los monos, que según la creencia hinduísta balinesa encarnan fuerzas positivas y negativas, tal como quedó reflejado en varios pasajes de la obra de la Ramayana, célebre poema de la épica hindú.
Previo paso por taquilla, 20.000 rupias, accedimos al interior del bosque sagrado siguiendo un camino empedrado y no tardamos mucho tiempo en encontrarnos con los primeros monos, en su inmensa mayoría macacos jóvenes, que estaban a su aire, muy aconstumbrados a la presencia de las personas. Observamos que sólo se alteraban cuando veían a personas portando plátanos comprados en los puestos habilitados a tal efecto en la entrada o como mucho se podían subir encima tuyo cuando te acercabas demasiado, en estos casos hay que seguir las indicaciones que figuran a la entrada al recinto, seguir caminando con naturalidad y no hacer ningún tipo de aspaviento que es cuando pueden ponerse agresivos y morderte.
A ambos lados del camino se encuentra el territorio de los monos, un inmenso bosque con un pequeño sendero que conduce a un paisaje de selva, con ciento quince especies de árboles, algunas de ellas son consideradas santas para la religión balinesa utilizándose en prácticas espirituales, así el majegan para la construcción de santuarios, el berigin cuyas hojas se utilizan en las ceremonias de cremación o el pule bandak de especial significado ya que este arbol representa el espíritu del bosque y es utilizado para elaborar poderosas máscaras que sólo se utilizan en el interior del templo. Un día considerado propicio para la religión balinesa, el sacerdote del templo pide permiso al espíritu del árbol para cortar un pequeño trozo de su madera, así el espíritu del árbol se incorpora a la máscara.
El Monkey Forest es como un lugar mágico... puentes de piedra, enigmáticas esculturas, colosales árboles centenarios de los que cuelgan lianas, riachuelos y cómo no los tres templos. El pura principal, Dalem Agung, del siglo XIV está dedicado a la muerte, para acceder a su interior es preceptivo el uso de sarong, si no lo llevas contigo a la entrada te lo alquilan, el Pura Holy Bathing, situado en la zona boscosa junto a un riachuelo, construído siguiendo el concepto de tres mandalas y el Pura Prajapati utilizado para el rito de las cremaciones, está ubicado junto a un pequeño cementerio.
Tras la increíble experiencia en el Bosque Sagrado de los Monos caminamos por jalan Monkey Forest donde nos llamó la atención la presencia de pequeños locales integrados en los hermosos paisajes de los arrozales.
A la mañana siguiente llegó el momento de la despedida, con tristeza, pero también con alegría por los buenos momentos vividos, dijimos adiós a Indonesia, a sus arrozales, a sus templos, a sus volcanes, a sus gentes,...hasta pronto !!
En la religión hinduísta que busca el equilibrio en la dualidad del bien y el mal, se refleja también en los monos, que según la creencia hinduísta balinesa encarnan fuerzas positivas y negativas, tal como quedó reflejado en varios pasajes de la obra de la Ramayana, célebre poema de la épica hindú.
Previo paso por taquilla, 20.000 rupias, accedimos al interior del bosque sagrado siguiendo un camino empedrado y no tardamos mucho tiempo en encontrarnos con los primeros monos, en su inmensa mayoría macacos jóvenes, que estaban a su aire, muy aconstumbrados a la presencia de las personas. Observamos que sólo se alteraban cuando veían a personas portando plátanos comprados en los puestos habilitados a tal efecto en la entrada o como mucho se podían subir encima tuyo cuando te acercabas demasiado, en estos casos hay que seguir las indicaciones que figuran a la entrada al recinto, seguir caminando con naturalidad y no hacer ningún tipo de aspaviento que es cuando pueden ponerse agresivos y morderte.
A ambos lados del camino se encuentra el territorio de los monos, un inmenso bosque con un pequeño sendero que conduce a un paisaje de selva, con ciento quince especies de árboles, algunas de ellas son consideradas santas para la religión balinesa utilizándose en prácticas espirituales, así el majegan para la construcción de santuarios, el berigin cuyas hojas se utilizan en las ceremonias de cremación o el pule bandak de especial significado ya que este arbol representa el espíritu del bosque y es utilizado para elaborar poderosas máscaras que sólo se utilizan en el interior del templo. Un día considerado propicio para la religión balinesa, el sacerdote del templo pide permiso al espíritu del árbol para cortar un pequeño trozo de su madera, así el espíritu del árbol se incorpora a la máscara.
El Monkey Forest es como un lugar mágico... puentes de piedra, enigmáticas esculturas, colosales árboles centenarios de los que cuelgan lianas, riachuelos y cómo no los tres templos. El pura principal, Dalem Agung, del siglo XIV está dedicado a la muerte, para acceder a su interior es preceptivo el uso de sarong, si no lo llevas contigo a la entrada te lo alquilan, el Pura Holy Bathing, situado en la zona boscosa junto a un riachuelo, construído siguiendo el concepto de tres mandalas y el Pura Prajapati utilizado para el rito de las cremaciones, está ubicado junto a un pequeño cementerio.
Tras la increíble experiencia en el Bosque Sagrado de los Monos caminamos por jalan Monkey Forest donde nos llamó la atención la presencia de pequeños locales integrados en los hermosos paisajes de los arrozales.
A la mañana siguiente llegó el momento de la despedida, con tristeza, pero también con alegría por los buenos momentos vividos, dijimos adiós a Indonesia, a sus arrozales, a sus templos, a sus volcanes, a sus gentes,...hasta pronto !!
Gran lugar si señor
ResponderEliminaruno de los "parques" mas impresionantes que he visto
un abrazo
Hola Bleid,
EliminarGracias por tu comentario.
El Monkey Forest me gustó mucho,el inmenso bosque, los templos, monos...
Un abrazo.
¿Os he llegado a decir la envidia que me ha dado leer estás entradas? jejeje ;) Ya sólo con la introducción estaba salibando...
ResponderEliminarAunque seguro que con mi mano con los animales salvajes algún mono de esos acabaría encima de mí atacándome (recuerdo el ataque de un avestruz a mi coche hace no mucho tiempo en un safari park)
Una pena que éste ya fuera el último día. Me han encantado las entradas y estoy segura de que algún día volveré a leérmelas con más detenimiento.
Un saludo :D
Hola Helena,
EliminarGracias por tu comentario y tus palabras.
No te creas que andaba yo un poco mosqueado con los monos, pensando en los que habíamos "conocido" en la India, pero que va eran muy tranquilos...casi todos !!
Saludos.
Que maravilla de entrada, de fotos y de paisajes, dan ganas de meterse en el ordenador y aparecer entre los monos, jejeje.
ResponderEliminarUn abrazo !!!
Hola Carfot,
EliminarGracias por tu comentario.
Ya te digo, si estoy echando de menos a los monos..., pero sobre todo a Indonesia, quién pudiera estar allí ahora !!
Abrazos.
Increible lugar el Bosque de los Monos, qué maravilla! Aunque a mí que un mono se me acerque me da yuyu, hay algo en ellos (creo que su semejanza con nosotros) que me da respeto, jeje. Hicísteis bien tomando precauciones, son verdaderos artistas pillando lo que pueden. Una pena que acabe el viaje, he disfrutado mucho leyendo vuestro viaje y ya tengo otro destino pendiente. Un saludo.
ResponderEliminarHola Caliope,
EliminarGracias por tu comentario.
Con los monos había que guardar un poco las distancias...se volvían como locos cuando veían comida o bebida.
Saludos.
Que preciosos los monitos!!A mi me encantan!
ResponderEliminarEsperamos más relatos de vuestros viajes ,para releerlos con envidia.
Un besin.
Hola Ana,
EliminarGracias por tu comentario.
Los monos molaban, sobre todo los pequeños que eran una auténtica cucada.
Un besín.
Fue una buena despedida, un lugar increíble, como todos los que nos has mostado en las últimas semanas. Mira que me gustan los monos, pero no sé si llevaría muy bien estar totalmente rodeada XD
ResponderEliminarHola Artabria,
EliminarGracias por tu comentario.
A veces cuando estaban en grupo, daba un poco de cosa pasar al lado de ellos, sobre todo por si se te subían encima...
Saludos.
Un lugar de película metidos totalmente en la selva monera!!!
ResponderEliminarHola Antonio,
EliminarMuy bien definido, un lugar de película solo faltaba la llamada de Tarzán...
Saludos.
Con toda la tranquilidad del mundo tengo que sentarme a leer y releer bien todos vuestros relatos de indonesia. Empieza a ganar fuerza un posible viaje Singapur-Indonesia para el año que viene... Lo malo, los meses que irremediablemente tendría que ser desde la última semana de junio hasta mitad de julio (3 semanas). No se como me irá con el tiempo..
ResponderEliminarLo dicho, a tomar apuntes me toca!!
Hola Xipo,
EliminarGracias por tu comentario.
Indonesia es un destino muy recomendable, en tres semanas yo creo que puedes visitar tres islas. Lo bueno que tiene de viajar a Indonesia en verano es que no le afecta el monzón, al contrario que otros países de su entorno y la temperatura además es muy agradable.
Saludos.
Una maravilla de viaje. Me ha encantado todo lo que cuentas y también las fotografías (los monos, qué graciosos).
ResponderEliminarUn saludo
Muchas gracias por tus palabras y bienvenida a El mundo a tus pies !!
EliminarSaludos.
Jo, que lugar tan fascinante... me ha encantado, de verdad. Y los monitos... que bonitos son!!!
ResponderEliminarUn saludo,
Hola Cool,
EliminarGracias por tu comentario.
El Monkey Forest es como un lugar mágico, el bosque, los árboles centenarios, las enigmáticas esculturas, los templos...todo !!
Saludos.
Que bueno los monos!!
ResponderEliminarHola Javier,
EliminarGracias por tu comentario.
Los monos a la mínima que te descuidabas hacían de las suyas...se te subían encima o te cogían la comida o bebida que llevases contigo.
Saludos.
Vaya lugar más increíble!! Encima los monos siempre son unos personajes, me recuerdan a algunas fotos que tengo de mis visitas a Gibraltar, que andan allí libres por el peñón y siempre haciendo de las suyas XDDD
ResponderEliminarSaludos!
Jose Carlos, el Bosque Sagrado de los Monos es un lugar fascinante, mágico !!
EliminarMe quedo con los monos de Ubud, los de Gibraltar como que no me simpatizan mucho, la verdad.
Saludos.
Wow!, me ha fascinado! ... son como personitas :) :)
ResponderEliminarAunque sobretodo el entorno es una auténtica maravilla!!, increíble lugar!
Qué suerte! un saludo!
Hola Alfonso,
EliminarGracias por tu comentario.
Los monos, el bosque, los árboles centenarios, las enigmáticas esculturas, los templos...la Reserva Sagrada del Bosque de los Monos es un lugar mágico, increíble !!
Saludos.
Mira que me gustan los monos pero no veas qué macarras están hechos!!!! Este lugar tiene que ser espectacular, no solo por la cantidad de monos que hay si no por el paisaje, la selva y las esculturas escondidas en su interior. Sin lugar a dudas tiene que ser espectacular pasear por allí aunque siempre con cuidado que yo se de uno que se llevó un buen mordisco en la cabeza, jejejeje. Un abrazo!!! ;-)
ResponderEliminarHola Babyboom,
ResponderEliminarNo las tenía todas conmigo con los monos, después de la experiencia vivida en la India, pero teniendo un poco de cuidado no hay problema.
El bosque sagrado de los monos es sin duda uno de los lugares imprescindibles en Bali.
Un abrazo.