Sierra de Gata, la gran desconocida

     Sierra de Gata, una comarca bella, pero a la vez desconocida y menos promocionada turísticamente que comarcas vecinas como las Hurdes, la Vera o el Parque Nacional de Monfragüe  y ello, a pesar de contar con recursos suficientes para atraer a cualquier viajero. Atrás queda su aislamiento de antaño que ha permitido que llegue hasta nuestros días una forma de vida propia, su arquitectura tradicional, su lengua vernácula “a fala”, que hoy día se sigue hablando por los sierragatinos, en sus diferentes variantes, según el habla de cada pueblo, el mañegu, el lagarteiru o el valverdeiru, y donde sus habitantes aún reciben con los brazos abiertos al visitante que llega, poco acostumbrados al turismo.

   En un entorno privilegiado, de naturaleza única, que todavía no ha sido alcanzada por la mano del hombre, formado por valles, bosques sombríos bañados por ríos y con un clima excepcional, más suave que sus comarcas vecinas, lo que permite que se den cultivos mediterráneos, como la vid y el olivo. Y una amplia ganadería caprina, que transita por sus pastos y del que se obtiene el excelente queso de cabra de la zona. Formada por veinte pequeños pueblos con encanto, cinco de ellos declarados bienes de interés turístico, intentaremos darla a conocer al lector.

La Sierra de Gata está enclavada en el noroeste de la provincia de Cáceres, fronteriza con la comarca vecina de las Hurdes, Portugal, el Valle del Alagón y Salamanca por el norte.

A principios del mes de agosto de 2015, conocimos una triste noticia, el incendio que devastó más de 7.000 hectáreas de la comarca. A pesar de todo, Sierra de Gata continúa siendo verde.

Visitando la Almazara As Pontis

  La Almazara está ubicada en Erjas, muy cerca de Valverde del Fresno. Durante la visita, Miguel, maestro de la almazara, nos explica todo el proceso de elaboración del aceite de oliva virgen extra, desde el momento en que los camiones descargan la manzanilla extremeña en la almazara y bajo su atenta supervisión se sigue paso a paso todas las fases de producción, la molienda, batido, decantación, centrifugación,…hasta el envasado. Siguiendo las amenas explicaciones de Miguel, vamos visitando todas las modernas instalaciones de la almazara y terminamos con una cata de aceite de oliva virgen extra, servido en un recipiente opaco, que no permita ver su color, posteriormente se atempera con las manos y finalmente se procede a la cata, en ella Miguel nos enseña a apreciar los matices afrutados del aceite en nuestro paladar, con sabor a tomate, hierba recién cortada,…y a detectar su aroma.

   La Almazara As Pontis comenzó su andadura en noviembre de 2008,  empresa familiar en busca de un aceite de oliva extra de excelente calidad, que respetase el medioambiente en su proceso de producción, eliminando el 100% de los productos tóxicos. El aceite de esta almazara es elaborado con 100% de manzanilla cacereña, autóctona y propia de la Sierra de Gata. Actualmente, tiene su propia marca de aceite de oliva extra “Vieru”, ofreciendo servicio de molturación y envasado. La almazara cuenta con los avances tecnológicos punteros, convirtiéndola en la más avanzada tecnológicamente de Extremadura y una de las primeras de España. Y tiene un futuro garantizado con una amplia demanda en el comercio nacional e internacional y con el reconocimiento que obtiene día a día con la obtención de numerosos premios no solo a nivel nacional sino también fuera de nuestras fronteras.

En ruta 4x4 por la Sierra de Gata

   De la mano de José de misierradegata.com nos aventuramos a conocer los rincones más bellos y especiales de la Sierra de Gata. Con punto de partida es el pueblo de Descargamaría, desde allí nos dirigimos en 4x4 a descubrir los diferentes puntos de interés. La primera parada es para visitar el antiguo puente medieval y su entorno natural. Continuamos ruta y nos dirigimos a las antiguas minas de oro, hoy en desuso, por el camino, aún se puede ver algún refugio rudimentario, construidos en piedra, que servían de resguardo a los pastores. Tras un alto en el camino para detenernos a visitar un río aurífero, con escaso caudal en ese momento, proseguimos la interesante ruta hasta un mirador, que se asoma al vacío, con forma de dolmen y que ofrece las mejores vistas de la Sierra de Gata.

   Llegamos a uno de los puntos más especiales del recorrido en 4x4, el Mirador del Chorro de los Ángeles, una excelente atalaya desde la que se tienen unas estupendas vistas panorámicas y desde el que podemos avistar buitres leonados, cigueña negra y el alimoche. Finalizamos la visita, en otro punto más cercano, para avistar con más proximidad los nidos del buitre leonado.

Aunque la Sierra de Gata está enclavada en Extremadura, goza de temperaturas más suaves que otros lugares de la provincia de Cáceres, por lo que puedes visitarla durante los meses de estío. Aún así, en los días más calurosos puedes refrescarte en las piscinas naturales, que se ubican en varios de sus pueblos.

Trevejo y su Castillo de origen árabe

   Nuestra base para conocer los rincones que atesora la Sierra de Gata fue la pequeña aldea medieval de Trevejo. Por su carretera de acceso desde Villamiel se deja entrever lo que te espera al llegar al alto, el pueblo de Trevejo asentado a los pies de las ruinas del Castillo.

 

    Trevejo es una pequeña aldea, ubicada estratégicamente, de poco más de veinte habitantes, declarada de Interés Turístico, sus casas de piedra, de arquitectura tradicional, bien conservadas y sus calles empedradas llenas de historia conducen a la parroquia de San Juan y a las ruinas del Castillo.

Para alojarse en Sierra de Gata, la mejor opción es hospedarse en una casa rural. Te recomendamos los Apartamentos rurales A Fala situados en Trevejo, que están muy bien equipados y ofrecen todo tipo de comodidades  para el viajero que te aseguran un buen descanso.

    Accedimos a pie al Castillo, que se encuentra a pocos metros del pueblo. El Castillo tiene su origen en una fortaleza árabe, datada con anterioridad al siglo XII, sobre la que se edificó una nueva fortaleza a finales del siglo XV. En la actualidad se conserva la torre del homenaje y gran parte de la muralla. En la base de la fortaleza se halla la Parroquia de San Juan, del siglo XVI, en la que destaca su torre espadaña, independiente. En los alrededores de la Parroquia se encuentran varias tumbas talladas en la roca.

     Al lado de la Parroquia de San Juan, hay un balcón mirador con vistas panorámicas a la comarca y a la sierra, en el que puedes disfrutar de la paz, sosiego y tranquilidad, que se disfruta en el pueblo, sólo interrumpido por el tintineo de los cencerros de los rebaños de cabras que pastan por la zona.

San Martin de Trevejo y su lengua, el mañegu

   San Martín de Trevejo declarado bien de interés cultural. El pueblo reúne en sus calles la arquitectura tradicional, viviendas de dos alturas y una planta baja donde antaño se guardaba el ganado y hoy se dedica a despensa o almacén de la vivienda, la planta baja de piedra sobre un entramado de madera, que alberga las otras plantas de la vivienda. También se conservan algunas casas señoriales con su de escudo de armas y aún se puede ver arroyando por sus calles un regato de agua, cuya finalidad es el regadío.

 


   Paseamos por sus calles empedradas en compañía de nuestros amigos Rebeca y Sele, de el rincón de sele sorprendiéndonos a cada paso por la buena conservación de su arquitectura y la amabilidad de sus gentes, que tomaba el fresco a las puertas de sus casas y dispuestas a guiarte en la visita. Así es como fuimos testigos de una conversación en la fala local, el mañegu.

 




La gastronomía de Sierra de Gata es excelente, elaborada a partir de sus propios productos, como el aceite de oliva, el vino de pitara, la miel, el queso de cabra,...Para degustarla recomendamos el restaurantes Os Arcus, situado en la Plaza Mayor de San Martín de Trevejo. No dejes de probar la ensalada de naranja, exquisita.






   No se puede dejar de visitar el ágora de San Martin de Trevejo, su acogedora plaza porticada, que alberga una fuente en su centro y su bella torre campanario.