En nuestro último día en Malta, no nos podíamos ir del país sin conocer una de los lugares más bonitos de Malta, la isla de Gozo. Los primeros habitantes se remontan al 5.000 A.C. Pero, una fecha ha marcado para siempre la historia de la isla, en julio de 1551 fue invadida por los turcos llevándose prisioneros a gran parte de la población hasta la localidad de Tarhuna. La historia de Gozo y del resto de Malta siempre han estado unidas, salvo un pequeño paréntesis de dos años de 1798 a 1800, en el que se mantuvo independiente. Para llegar a la isla, primero tuvimos que tomar el bus 401 en La Valeta, que nos acercó hasta la terminal de ferrys en Cirkewa, allí tomamos el barco que tras una travesía de veinticinco minutos nos llevó hasta Mgarr, ya en la isla de Gozo. El billete del ferry cuesta 4,65 euros. Durante el tranquilo recorrido en el moderno ferry, pasamos al lado de la pequeña isla de Comino, desde los ventanales del barco pudimos ver en lo alto de la isla la torre defensiva de Santa María, construída en 1618 por orden del Gran Maestre Wignacourt, el arquitecto maltés Vittorio Cassar dirigió los trabajos.
Los Caballeros de la Orden de Malta IV
20 marzo 2012
VISITAMOS BLUE GROTTO, MARSAXLOKK, HAL SAFLIENI HYPOGEUM Y SLIEMA
En nuestro cuarto día en Malta, nos acercamos nuevamente hasta la estación de autobuses, donde tomamos el bus 71, que nos llevó hasta Zurrieq. Desde el pueblo hasta el que sería nuestro principal punto de interés, la Blue Grotto, hay un camino de treinta minutos, pero no hay problema de pérdida porque está perfectamente señalizado, sólo hay que salir a la carretera general y seguir las indicaciones. En el paseo disfrutamos de un paisaje de chumberas, que contrastaba con el color azul del Mar Mediterráneo que se atisbaba al otro lado del camino y así llegamos al paraje natural que más nos gustó en Malta y que nos dejó boquiabiertos, la Blue Grotto, la Gruta Azul. La belleza es tal, que es difícil de describir con palabras.
Los Caballeros de la Orden de Malta III
15 marzo 2012
PASEANDO POR MDINA, LA CIUDAD DEL SILENCIO. Y NOS VAMOS A RABAT, MOSTA Y DINGLI
A la mañana siguiente nos acercamos, nuevamente, a la estación de autobuses, donde tomamos el bus 52 que nos acercó hasta Mdina. Los romanos la llamaron Melita, "ciudad de la miel" por las numerosas colmenas que había en la zona, ubicando su capital en la ciudad. En el año 880 los árabes amurallaron la ciudad, construyendo un foso y llamándola Mdina, que significa la ciudad, dejando un espacio fuera de la ciudad amurallada, Rabat. Durante la Edad Media fue sede del gobierno y lugar de protección para la población. Pero con la llegada de los Caballeros de la Orden de San Juan, estos decidieron asentarse en las proximidades del puerto y en 1751 al construirse la Valeta , trasladaron la capital hasta allí, pasando a denominarse Mdina, como la ciudad vieja.
Los Caballeros de la Orden de Malta II
09 marzo 2012
RETOMAMOS LA VISITA A LA VALETA Y NOS VAMOS A VISITAR VITTORIOSA
Amaneció el día en la Valeta con un viento huracanado, que nos iba a condicionar las visitas que teníamos previstas para esta jornada. A pesar de las inclemencias meterorológicas subimos a la azotea del hotel desde la que se tienen unas vistas excepcionales de la ciudad, de entre todos los tejados sobresale la cúpula de la Iglesia de los Carmelitas, que visitaríamos posteriormente. Retomamos la visita a la Valeta en Republic Street, la calle principal, jalonada por edificios barrocos de piedra caliza y con balconadas de madera pintadas en color verde. La calle aún conserva a lo largo de su recorrido, el legado británico con las cabinas y buzones "modelo british" que recuerdan la herencia de muchos años de dominio inglés en la isla.
Los Caballeros de la Orden de Malta I
05 marzo 2012
LLEGAMOS A MALTA E INICIAMOS LA VISITA A LA VALETA
Nuestro viaje a Malta comenzó en el aeropuerto de Barajas donde tomamos un vuelo que nos llevó al Aeropuerto Internacional de Malta. Al llegar, elegimos la opción del bus X4, que en sólo veinte minutos nos dejó en la céntrica estación de autobuses de la Valeta. A sólo cinco minutos andando de la estación se encontraba el que iba a ser nuestro alojamiento y base para visitar Malta, el Hotel Osborne, en la calle South Street, edificio rehabilitado que perteneció a la Orden de San Juan.