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Dando buena cuenta de los creps... |
Tras una primera toma de contacto nocturna con la ciudad nos vismo sorprendidos por un masivo turismo occidental al que no estamos acostumbrados días anteriores, callejeamos en busca de un lugar para cenar y donde no nos cobrasen las abusivas tasas, muy habituales en Ubud, y así descubrimos una acogedora crepería regentada por una amable francesa Michele, Confiture Michele, situada en jalan Gootama, con unos creps que estaban deliciosos, el precio 10.000 rupias los dulces y 25.000 rupias los salados.
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Confiture Michele |
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Estanque de flores de loto con el templo al fondo |
A la mañana siguiente nos dispusimos a hacer una ruta por los arrozales de Ubud. En el camino nos detuvimos en el emblemático
Café Lotus, emplazado en jalan Raya, su interior lo forma un conjunto idílico, un bellísimo estanque de flores de loto enmarcado en el fondo por el
Pura Taman Saraswati, dedicado a la diosa hindú de la sabiduría. No pudimos acceder al templo ya que se encuentra siempre cerrado al público para visitar. Todas las noches, salvo los viernes, a las 19 :30 horas, hay un espectáculo de danza balinesa, entrada 80.000 rupias.
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Café Lotus |
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Pura Taman Saraswati |
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Trabajando los arrozales |
Para llegar a los
arrozales que visitamos, primero, hay que pasar unos metros el Café de Lotus, luego hay un primer acceso que está cortado, así que hay que seguir caminando hasta un segundo acceso donde una pequeña indicación en inglés señala el camino a los arrozales. Paseamos durante cuatro horas disfrutando de los campos de arroz, que en su mayoría se encontraban recién plantados y por ello anegados, con campesinos trabajando y protegiéndose del calor con los típicos sombreros cónicos. El recorrido es sencillo y fácil de seguir, siempre en dirección a los campos de arroz y en el trayecto hay que atravesar una pequeña zona boscosa antes de continuar. Encontramos algún café al principio y al final del paseo, donde poder hacer un alto y refrescarse.
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Arrozales anegados por el agua |
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Arrozales en Ubud |
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Ofrenda a Dewi Sri, diosa del arroz |
En nuestro camino por los arrozales tuvimos la compañía de mariposas de diversos tamaños y colores que revoloteaban a nuestro alrededor. Mientras disfrutábamos del paisaje más característico de Bali, nos llamó la atención los pequeños puestos de pintores locales que inmortalizaban con sus pinceles escenas del folclore balinés. Continuámos caminando tranquilamente por los arrozales observando las ofrendas de los campesinos en honor a
Dewi Sri, diosa del arroz, para tener buenas cosechas.
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Mariposa acompañándonos en nuestro paseo |
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Pintor local inmortalizando escenas del folcrore balinés |
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Trono Vacío en Pura Dalem Ubud |
Nos despedimos de los arrozales, saliendo por Campuhan en las afueras de Ubud, a pocos metros se halla
Pura Dalem Ubud, uno de los muchos templos de rito hindú balinés que se encuentra en la isla, tuvimos la fortuna de poder visitarlo en solitario, observando con detalle algunas de las características de los templos públicos o pura, tales como la puerta partida, el trono vacío o numerosas imágenes de las deidades hindúes. Nos llamó la atención una constante en la mayoría de los templos que visitamos en Bali, la presencia en la entrada de árboles centenarios con enormes raíces que sobresalen de la tierra.
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Pura Dalem Ubud |
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Árbol centenario en el templo |
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Templo familiar con la imagen de Ganesha |
Caminando por jalan Raya entramos en un pequeño templo, hermoso y muy bien cuidado, que resultó ser un
templo familiar. Una de las características de todas las viviendas en Bali es la presencia de un templo familiar que recuerda a los ancestros. Justo a la entrada del templo nos encontramos con una imagen de
Ganesha, deidad hindú con cabeza de elefante, hijo de Shiva y Parvati. Dice la leyenda, que un día Parvati cogió un poco de ceniza que le había colocado Shiva sobre su pecho, añadiendo luego unas gotas de agua que aún quedaban en su cuerpo, después de un baño, lo juntó todo y así nació Ganesha con apariencia humana. La diosa Parvati a veces deseaba quedarse sola en Palacio, así que mandaba a su fiel hijo, Ganesha a que quedase junto a la puerta y no dejase pasar a nadie sin su consentimiento. Pero un día Shiva deseoso de ver sin demora a su mujer intentó entrar, pero al no contar con autorización Ganesha no le dejó pasar, furioso Shiva desenfundó su espada y cortó la cabeza de su hijo. Parvati horrorizada por lo ocurrido rogó a Shiva que le devolviese la vida. El dios Shiva mandó a uno de los sirvientes que le trajese la primera cabeza que encontrase y así le trajo la de un elefante. Shiva la colocó sobre los hombros de su hijo, resucitando a Ganesha.
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Detalle del templo |
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El templo familiar desde la puerta de entrada |
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Templo camino del centro |
A cada paso que dábamos un nuevo templo se descubría a nuestros ojos y así fue como llegamos al centro de Ubud, donde callejeamos por los alrededores del Palacio Real, por Suweta jalan, viendo el devenir diario de la población local que vive en armonía con los numerosos viajeros que pululan por la ciudad. Enfrente del Palacio Real, que visitaríamos los próximos días, se halla un curioso pabellón al aire libre que hace las funciones de lugar de encuentro de la población balinesa. Ya de noche finalizamos el día cenando en un
warung, restaurante de comida local exenta de las abusivas tasas, en jalan Arjuna por un irrisorio precio.
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Pabellón donde se reune la población local |
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Detalle de los templos en Suweta jalan |
Bonitas fotos. Me encanta Ubud!
ResponderEliminarMuchas gracias !! y bienvenido a El mundo a tus pies.
EliminarSaludos.
Una zona que me gustaría visitar, los arrozales, los templos me recuerdan mucho a Tailandia.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Pilar,
EliminarGracias por tu comentario.
El paseo por los arrozales de Ubud es muy bonito, pero los campos de arroz que vimos los días siguientes superaron en belleza a los de Ubud.
Un abrazo.
Un lugar precioso, qué curioso lo de los templos familiares!!!! Los paisajes son espectaculares y la habitación en la que os quedasteis tenía que ser muy chula, menudas vistas tenía que haber de los arrozales!!! Un abrazo. ;-)
ResponderEliminarHola Babyboom,
EliminarGracias por tu comentario.
Qué bonito era el templo familiar que visitamos. Todas las casas en Bali tienen su pequeño templo.
El hotel en el que nos hospedamos en Ubud fue una buena elección, la habitación era muy chula, en estilo balinés con vistas a los arrozales.
Un abrazo.
Ayy qué sitio más chulo!! Qué suerte que fuera la época de ver los arrozales en todo su esplendor!!! Los templos me recuerdan un poquito a los de Angkor!
ResponderEliminarPor cierto, qué curiosa la historia de Ganesha!! He visto mogollón de veces esa figura pero no tenía ni idea.
Un abrazo
Hola Carmen,
EliminarGracias por tu comentario.
La leyenda de Ganesha con su cabeza de elefante y de las demás deidades hindúes son muy curiosas.
Un abrazo.
De esta entrada me quedo con Pura Taman Saraswati, esos templos con esos lagos con flores de loto por encima me encanta. Y esos arrozales en su punto ideal deben ser una gozada de verlos allí en directo.
ResponderEliminarNada, me estás vendiendo Indonesia de maravilla. Pues nada, ya ando al día con tus relatos :P
Saludos!!!
Hola José Carlos,
ResponderEliminarGracias por tu comentario.
El interior del Cafe Lotus con el estanque de flores de loto y al fondo el templo de Taman Saraswati forman un conjunto idílico. Lástima que no se pudiera visitar el interior del templo.
Saludos.
Los arrozales son espectaculares, una de las imágenes del sudeste asiático!! El café lotus me ha encantado. Como jose Carlos veo que estas vendiendo el país muy bien y ganar no nos faltan para irnos para allá.... Saludos
ResponderEliminarHola Fran,
EliminarGracias por tu comentario.
Fran, también me entran a mi unas ganas de volver, que cogía ahora la maleta y me iba para allí ya !!
Saludos.
¡Precioso! Me ha encantado todo lo que visteis este día. El café Lotus impresionante y los arrozales estaban espectaculares, ¡qué colores más bonitos!
ResponderEliminarDesde luego, me dan ganas de salir ya para allá.
Un saludo ;)
Hola Helena,
EliminarGracias por tu comentario.
El Café Lotus con el estanque con las flores de loto y al fondo el templo Taman Saraswati, los arrozales...qué recuerdos !!
Saludos.
Hola, excelente post con unas fotos fantásticas. Me llama mucho la atención esos templos de familia.
ResponderEliminarAbrazos.
Hola Antonio,
EliminarGracias por tu comentario.
Los templos familiares que visitamos en Ubud nos encantaron, los descubrimos por casualidad.
Un abrazo.
Que bonito tiene que ser Indonesia, sin duda un país en el que pasar una temporada.
ResponderEliminarTe he dejado un premio Liebster para ti en mi blog, http://www.elcoleccionistadeciudades.com/2012/10/premios-liebster.html
Un saludo y a seguir contandonos
Hola Álvaro,
EliminarGracias por tu comentario.
Indonesia es un país que tiene muchos lugares que descubrir y del que guardo buen recuerdo.
Gracias por el premio y por acordarte de mi.
Saludos.
Que gran destino!! Le tengo muchisimas ganas, tiene que haber rincones encantadores.
ResponderEliminarPor cierto, te he dejado un premio en mi blog. Un saludo
Hola Mafi,
EliminarGracias por tu comentario y por el premio que me has dado !!
Mafi, Indonesia como bien dices tiene rincones encantadores, te lo recomiendo.
Saludos.
Ubud es uno de los lugares mas bellos que hemos visto nunca
ResponderEliminara pesar de ser tan turistico, en cuanto te alejas un poco de la ciudad puedes apreciar unos lugares increibles como los que nos mostrais
gracia por recordarmelos
abrazos
Hola Bleid,
EliminarGracias por tu comentario.
Ubud es un lugar muy turístico, pero cuando te alejas de la ciudad descubres la auténtica Bali.
Un abrazo.
Las imágenes de los arrozales son siempre espectaculares!! Por cierto, si te pasas por mi blog verás que tienes un regalito en forma de nominación!! :)
ResponderEliminarHola Anna,
EliminarGracias por tu comentario.
Los arrozales son muy bellos. Los días siguientes descubrimos campos de arroz que aún nos gustaron más.
Anna, ya me he pasado por tu blog, gracias por el detalle de acordarte de mi !!
Saludos.
Buenos días!! Te he nominado para los Premios Liebster, si quieres pásate por mi blog :-)
ResponderEliminarHola Artabria,
EliminarGracias !! son los detalles que me animan a seguir adelante con el blog.
Saludos.
Hola!! Te he dejado mi nominación para los Liebster en mi blog
ResponderEliminarHola Conchi,
EliminarGracias por acordarte de mi y bienvenida a El mundo a tus pies !!
Saludos y estamos en contacto.
Se ve que empezastéis a bajar el ritmo y a disfrutar de un pequeño descanso... Siempre me ha hecho ilusión ver estos campos de arroz.. es una imagen idílica que tengo en la cabeza.
ResponderEliminarCurioso lo de Ganesha... no tenía ni idea de su historia...
A ver si me pongo al día...
Un abrazo amigos!
Tocayo, los campos de arroz de Ubud y los de Tegallalang son increíbles, ya por sí solos justifican el viaje a Indonesia.
EliminarSí que es curiosa la historia de Ganesha...
Un abrazo.
What a unique and lovely experience. Thank you for sharing it with us. Beautiful photos, as well.
ResponderEliminarThank you so much, Erin and welcome to the blog !!
EliminarThe rice fields in Ubud are amazing.
Kind regards