Dubai, la
capital mundial de los superlativos, la más alta, la más grande,… la ciudad de
los rascacielos, del lujo y del consumo, considerada por méritos propios, la
capital de las compras y del entretenimiento de Oriente Medio. Más de setenta
centros comerciales, entre ellos el Dubai Mall, el más grande del mundo,
hoteles exclusivos de siete estrellas como el Burj Al Arab , el edificio más
alto, Burj Khalifa o islas artificiales
como Palm Jumeirha. Pero, Dubai conserva una parte tradicional que se extiende a lo
largo del Dubai Creek, el canal que atraviesa la ciudad y que separa los
barrios de Deira y Bur Dubai y que merece también la pena ser visitado.
El moderno Dubai
Hoteles de
lujo, rascacielos en busca del infinito vestidos de cristal, centros comerciales que acogen las
más dispares actividades de ocio como pistas de ski, acuarios,…islas
artificiales con urbanizaciones exclusivas,…atrás queda la crisis de 2008 y
2009 provocada por el pinchazo de su burbuja inmobiliaria, que hizo tambalear
al emirato, obligándole a buscar
financiación en el emirato vecino de Abu Dhabi. Hoy es una economía en auge. Contrario
a lo que se podía pensar, el petróleo sólo representa el 4 % de su PIB, por lo
que las autoridades dubaitíes tiene como objetivo la diversificación de su
economía, buscando situar a la cosmopolita ciudad a la vanguardia del turismo,
el sector financiero, de negocios y de la propiedad inmobiliaria. Pero,
no es oro todo lo que reduce, una mano de obra barata y con escasos derechos
laborales, procedente en su mayoría de la India, Pakistán y Bangladesh, son la
cara oculta del auge de la construcción donde las grúas se agolpan por doquier.
El Burj Al Arab, un hotel de siete estrellas
Nos acercamos con curiosidad
hacia una de las visitas imprescindibles de Dubai, el Burj Al Arab, calificado
como uno de los pocos hoteles de siete estrellas del mundo, aunque oficialmente
es de seis estrellas con lujo. Enclavado en un entorno privilegiado, sobre una
pequeña isla artificial, a pocos metros de la playa.
Inaugurado en 1999, su diseño
vanguardista no deja indiferente a nadie, con forma de embarcación de vela. Su
lujoso interior, en el que predomina el mármol, cuenta con 202 habitaciones,
todas suites y hasta con un pequeño helipuerto en la azotea. Nos acercamos
hasta que una barrera de acceso sólo permite el paso a los huéspedes alojados
en el hotel o a las personas que previamente han reservado en uno de sus
exclusivos nueve restaurantes, uno de
ellos, Al Mahara está situado bajo el nivel del mar.
Burj Khalifa, el edificio más alto del mundo
El Burj Khalifa te deja sin
palabras y con la mirada puesta en el infinito, la construcción más alta del mundo, 828 metros de altura. Diseñado
por el arquitecto Adam Smith, que inició su construcción en el año 2004,
inaugurándose oficialmente en 2010. El Burj Khalifa domina el cielo de Dubai y
que mejor manera de visitarlo que subiendo a sus dos privilegiados miradores al
atardecer, “At the top” situado en la planta 125 y “at the top sky” en el nivel
148, para contemplar desde lo más alto
“el milagro” de Dubai. Por desgracia, cuando visitamos la ciudad aún no había
abierto al público los observatorios.
La mejor forma de finalizar la
visita es contemplar, al anochecer, el espectáculo de la Fuente de Dubai, un
juego de agua y luces al compás de la música,
con la icónica imagen del Burj Khalifa, de fondo.
El viejo Dubai
Dubai es algo más que la imagen
de ciudad futurista, con rascacielos interminables, lujo y consumismo, también
guarda un Dubai tradicional, que se expande en los márgenes del Dubai Creek, la
ria natural, donde aún perviven las antiguas casas de mercaderes persas rematadas con sus torres del viento, las mezquitas también se hacen sitio en el Old Dubai y los bulliciosos zocos se reparten , el de las especias y del oro se concentran en una de las orillas y en la otra, el textil. Y
donde vive una población mayoritariamente extranjera, la mano de obra barata de
la construcción.
Dubai Creek, un paseo por los barrios tradicionales
El canal natural que cruza Dubai,
adentrándose 10 km en la ciudad y separando los barrios tradicionales de Deira
y Bur Dubai. Paseando a primera hora de la mañana por el puerto, aún es posible
observar los viejos y destartalados dhows, los barcos mercantes cargados hasta
los topes y que como antaño, aún transportan mercancías a los países vecinos.
Llama la atención, la forma manual de cargar las pesadas mercancías.
No podemos dejar de subirnos a las abras, las pequeñas barcas tradicionales de madera, que atraviesan el canal, comunicando de forma ininterrumpida los barrios de Deira y Bur Dubai, por sólo 1 dirham.
Perderse por los animados zocos de las especias y del oro enclavados bajo galerías de madera, en el barrio de Deira, mientras escuchas el sonido de la llamada a la oración del almoacín desde las mezquitas que salpican el Viejo Dubai. O cruzar en abra a la otra orilla, al barrio de Bur Dubai para visitar el zoco textil, donde adquirir telas, tejidos de todos los colores o pashminas.
Pasear por el barrio de Bastakiya,
donde aún se pueden contemplar las casas tradicionales de los antiguos
mercaderes persas, con las torres del viento, un antiguo y eficaz sistema de
ventilación, que refrigeraba las casas y que era un símbolo de poder económico,
a mayor número de torres mayor poder adquisitivo.
La edificación más antigua de
Dubai es el Fuerte Al Fahidi de 1787, en su interior alberga el interesante Museo
de Dubai, un ameno recorrido en la historia de la ciudad desde sus inicios,
como puerto dedicado a la pesca y al comercio de perlas hasta evolucionar a la ciudad
futurista en la que se ha convertido en la actualidad..
Muy recomendable también la visita a la mezquita de Jumeirah en las horas que dan una charla dentro dice explican las creencias y tradiciones islámicas del golfo pérsico, es en inglés, pero muy interesante.
ResponderEliminarUn saludo
Gracias Ivan y bienvenido a el mundo a tus pies. Tomo nota de la charla que recomiendas en la mezquita de Jumeirah para un próximo viaje por esas tierras.
EliminarUn saludo
Debe ser impresionante. Sé que algún día iré y me encantará.
ResponderEliminarGracias
Gracias Patricia y bienvenida a El mundo a tus pies. Dubai es una ciudad de contrastes que ofrece al visitante múltiples facetas y ése es su encanto. Si vas, seguro que te gusta.
EliminarSaludos
Os envidio pues no creo que me pasee por Dubai, también os quiero comentar que hacéis muy bien en viajar tanto ahora que sois jóvenes, poco os queda por conocer?, continuar mientras podáis pues aunque viajar sea mucho más fácil que en un pasado a la vez se complican en todos los aspectos.
ResponderEliminarUn abrazo pareja.
Gracias Pili, nosotros desde aquí te animamos a visitar Dubai, te sorprenderá. Todavía nos queda mucho mundo por recorrer y destinos que conocer, el planeta es muy grande.
EliminarUn abrazo
Ahhhh que precioso como me gustaría ir :-)
ResponderEliminarUna maravilla ,un "Sueño" pendiente entre otros muchos mas.
Besinos
Gracias Ana, Dubai despierta interés para cualquier viajero, porque te ofrece un montón de posibilidades y la mezcla entre lo moderno y lo tradicional, lo hace aún más atrayente.
EliminarUn beso
Hola Víctor,
ResponderEliminar¡Se ve que disfrutasteis del viaje!
Dubái es un destino muy recomendable para un fin de semana largo. Yo aproveché además para visitar Abu Dabi, que está realmente cerquita.
Saludos viajeros.